Nuestras reuniones dominicales están moldeadas por nuestros valores fundamentales, con Cristo en el centro de todo lo que hacemos.

• Adoración – Nuestras alabanzas están centradas en Cristo, exaltando Su nombre y proclamando Su gloria.

• Ordenanzas – La Cena del Señor es una parte regular de nuestro servicio, permitiéndonos saborear y palpitar el evangelio, recordando juntos el sacrificio de Cristo.

• Predicación – Nuestros sermones son expositivos, basados en la Palabra de Dios con el propósito de exaltar a Cristo y equipar a Su pueblo.

Familias se reunen una vez al mes para compartir una comida, orar, abrir la Palabra de Dios y adorar — creando un espacio acogedor donde las amistades crecen, la fe se profundiza y la gracia da forma a la vida diaria.

Los hombres son llamados a liderar, servir y crecer en la fe mientra desarrollan un carácter piadoso. Este grupo ofrece un espacio para hombres desde la adolescencia en adelante, donde pueden apoyarse mutuamente, orar unos por otros y construir relaciones significativas centradas en Cristo mientras enfrentan juntos los desafíos de la vida.

Abierto a mujeres desde la adolescencia en adelante, este grupo brinda un espacio para crecer en el conocimiento y amor de Cristo, viéndolo como el tesoro supremo. A través de la oración, el discipulado y el ánimo mutuo, las mujeres se desafían entre sí y construyen relaciones que reflejan la gracia y la verdad de Dios.

La Gran Comisión está en el corazón de nuestra misión. Deseamos alcanzar a aquellos que aún no conocen a Cristo, corriendo el velo para revelar Su luz. Caminamos junto a ellos, señalándolos al mayor tesoro Jesús, hasta que ellos también puedan compartir cómo han encontrado en Él su esperanza y gozo.